Reseña Un árbol crece en Brooklyn, Betty Smith

«Hay que mirarlo todo como si fuese la primera o la última vez. Así tu paso por la tierra estará repleto de dicha»

– Betty Smith

Este libro lo leí porque fue lectura conjunta del Club de Lectura Macondo. No sabía de la existencia de este libro antes de que fuera elegido en la votación, tampoco sabía de la existencia de la autora. Y de verdad que me alegro mucho de haberlo descubierto pues ha sido una muy linda lectura.

Betty Smith nos cuenta la historia de una familia pobre de Brooklyn a inicios del siglo XX, como muchas otras de la zona, que luchaban día a día por sobrevivir. Aquí conoceremos todo lo que sucede en torno a la vida de Francie, una niña muy inteligente, con una gran imaginación, que ama los libros y que como muchos niños sueña con tener una vida maravillosa. Francie Nolan vive (o sobrevive) con sus padres, Katie y Jhonny, y también con su hermano Neeley. Juntos y con la ayuda de la familia, principalmente las hermanas de Katie, buscan pasar cada día sobreviviendo a la misera y a una sociedad convulsa por la aproximación de la guerra.

No es un libro autobiográfico de la autora, sin embargo tiene muchos pasajes inspirados en su propia vida y ella misma decía que este libro no cuenta como fue su vida, sino como debería haber sido.

En un principio este libro no me gustaba mucho porque me hacia sufrir de verdad, leer todas las tragedias que vivía esta familia me dolía en el alma. Después comprendí que la maravilla de este libro estaba en su capacidad de meterse tan profundo en tu alma que te hacia sufrir los dolores de sus personajes y alegrarse por sus pequeños momentos de buenaventura. Llegué a sentir a la autora como a una amiga que en una tarde de café (o de té, porque no me gusta el café) me contaba una historia y yo atentamente escuchaba y empatizaba con ella. Muchas veces también me sentí como una invitada más en  el salón de la familia Nolan observando el curso de los acontecimientos, reconociendo cada mueble de la escena y hasta sintiendo el olor de las flores.

«Los libros se volvieron sus únicos aliados.» – Betty Smith

Mientras se nos cuenta en la historia la niñez de Francie, hubo dos momentos con los que me identifiqué completamente y que me encantaron. El primero de ellos es cuando Francie aprende a leer y descubre la magia que existe en los libros y la capacidad de los mismos de hacernos compañía. Y el segundo momento es cuando Francie descubre que está creciendo, pues toda la magia que la salvaba de las cosas feas de la pobreza empezaban a desvanecerse. Me hizo recordar cuando yo de niña lloraba porque no quería crecer.

«Crecer echaba a perder muchas cosas.» – Betty Smith

Este libro habla de pobreza, si. Pero también habla de perseverancia, de honestidad, de dignidad y de amor. Nos muestra la educación como ente transformador de vidas y tiene un toque feminista, muy trasgresor para la época en que fue escrito.

Yo recomendaría este libro a personas que gustan de leer sobre la vida misma. No es un libro donde haya acción y mientras lees pareciera que no pasa nada, pero luego haces un repaso de la historia y te das cuenta como ha transcurrido la vida a través de cosas cotidiana que también son importantes.

Lo que más me gustó: La capacidad de la autora de hacerte sentir parte de la escena mientras lees. Es muy raro que un libro provoque sentimientos tan profundos en mi.

Lo que menos me gustó: Paradójicamente, lo triste que me sentía al leerlo. Sobretodo al principio.

Ficha Tecnica - Un arbol crece en Brooklyn

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